De compartimos 10 Trastornos mentales frecuentes en las mujeres que buscamos visibilizar, dejando detrás mitos y estigmas, con el fin de que ellas reciban atención y tratamiento oportuno.
“Estás loca” es una de las frases más frecuentes para descalificar los sentires de las mujeres, una manera violenta de anular sus reclamos, y lo que es aún más grave un estigma sobre la enfermedad mental. Histéricas, neuróticas, sentimentales, hormonales… muchos son los calificativos que se generan alrededor del tema, cargados de prejuicios que impide tomar en serio la prevalencia de ciertos padecimientos y dificultan el diagnóstico y tratamiento oportuno.
Aprovechamos este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, para poner sobre la mesa la relevancia de hablar sobre la salud mental de las mujeres como un derecho, al que deben acceder a través de la atención adecuada, oportuna y sin discriminación.
Tan sólo en Estados Unidos los indicadores más recientes señalan que 1 de cada 5 mujeres (25%) experimentaron una afección de salud mental en el último año (referido al momento de la investigación).
El entorno social y familiar violento tiene un fuerte impacto en la salud mental, particularmente en las mujeres, por ello no es de asombrarse que sean éstas quienes reciben mayores diagnósticos de estrés postraumático, depresión o trastorno de ansiedad.
10 Trastornos mentales frecuentes en las mujeres
La carga social, familiar y laboral a la que están expuestas las mujeres las hace especialmente vulnerables a diversos padecimientos de índole mental, mismos que trastocan su vida y pueden, incluso, llegar a ser incapacitantes.
A continuación, señalaremos las afecciones de salud mental que tienen más probabilidades de padecer las mujeres y cómo las afectan de forma diferente*.
1. Trastorno de ansiedad. Las mujeres tienen más del doble de posibilidades que los hombres de experimentar un trastorno de ansiedad en su vida.
2. Depresión. En el último año, en Estados Unidos las mujeres fueron dos veces más propensas que los hombres a tener síntomas de depresión. La depresión no es una parte normal de ser mujer, un mito que retrasa el diagnóstico y el tratamiento. La mayoría de las mujeres, incluso aquellas con el tipo de depresión más grave, pueden mejorarse con tratamiento.
3. Depresión postparto. Se calcula que a nivel mundial 15% de las mujeres sufren “trastorno depresivo durante el período perinatal”.
El deber de un cuerpo perfecto
Los siguientes trastornos están muy vinculados a la presión social y mediática que se ejerce sobre las mujeres para mantener un cuerpo “perfecto”.
4. Trastorno dismórfico corporal (TDC). Es una enfermedad grave en la que la persona está demasiado preocupada por defectos físicos menores o imaginarios. Estos defectos percibidos no suelen ser notados por los demás o se consideran menores. Una persona con TDC puede sentirse ansiosa por sus defectos físicos, por lo que evita las situaciones sociales y las relaciones. También es posible que intente arreglar los defectos percibidos con cirugía estética. Las mujeres suelen estar bajo mucha presión por intentar cumplir con estándares de belleza que la sociedad le impone y es proclive al TDC.
5. Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA). Los trastornos de la conducta alimentaria, como la anorexia, la bulimia y el trastorno por atracón, son afecciones de salud mental graves que pueden ocurrirle a cualquier persona, pero son mucho más frecuentes en mujeres. Este se encuentra muy vinculado también a la presión social de mantener una figura corporal acorde a los estereotipos mediáticos.
El consumo de sustancias también es social
6. Trastorno por consumo de alcohol (alcoholismo o adicción). Las mujeres pueden experimentar mayores complicaciones a la hora de dejar ciertas sustancias debido a su dependencia a éstas, originada en el sistema nervioso.
Enfermedades neuropsiquiátricas
7. Trastorno bipolar. Los cambios hormonales durante el ciclo menstrual, el embarazo y la menopausia pueden afectar la gravedad del trastorno bipolar en las mujeres; sin embargo, los problemas del ciclo menstrual (como el síndrome premenstrual) no son iguales a los del trastorno bipolar.
8. Trastorno Obsesivo Compulsivo. El trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) es algo más frecuente en mujeres que en varones y afecta entre el 1 y el 2% de la población.
9. El trastorno límite de la personalidad (TLP) es una enfermedad mental grave. Causa inestabilidad en el humor, las relaciones, la imagen propia y la conducta de las personas de un día para el otro. Las mujeres son más propensas que los hombres a tener TLP.
Entornos violentos
10. Trastorno por estrés postraumático (TEPT). Este se presenta después de un evento peligroso o atemorizante, es normal sentirse molesta, asustada y ansiosa. Las mujeres son dos veces más propensas que los hombres a desarrollar TEPT en sus vidas. Se ha observado que la violencia doméstica puede producir este trastorno.
Violencia contra mujeres y enfermedad mental
El abuso, ya sea físico, emocional, verbal o sexual, puede tener efectos a largo plazo en la salud mental. Las mujeres que han pasado por el abuso u otro trauma tienen mayor riesgo de desarrollar una afección de salud mental, como depresión, ansiedad o trastorno por estrés postraumático (TEPT).
La violencia contra las mujeres se considera un problema mundial de salud pública, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), desde el año 2005. En el caso de las mujeres con enfermedad mental las cifras se incrementan de forma considerable.
- 3 de cada 4 mujeres con enfermedad mental grave han sufrido en algún momento de su vida violencia en el ámbito familiar o de la pareja.
- Alrededor del 80% de las mujeres con enfermedad mental grave que han estado en pareja han sufrido violencia en algún momento de su vida adulta.
- El riesgo que tiene una mujer con enfermedad mental de sufrir violencia en la pareja se multiplica entre 2 y 4 veces cuando se tiene una enfermedad mental grave.
- El 26% de las mujeres con enfermedad mental grave han sufrido violencia sexual en la infancia.
- El 42% de las mujeres con enfermedad mental grave que están viviendo violencia en la pareja no la identifican como tal.
En más de la mitad de las ocasiones, la persona profesional de referencia del ámbito de salud mental no conocía la existencia del maltrato ocurrido.
💜 NOTA AL PIE: Subrayamos aquí que estos trastornos no se presentan de manera voluntaria o actitudinal. Deben ser consideradas enfermedades que requieren un diagnóstico y tratamiento de la mano de un profesional. Las mujeres no manifiestan estos síntomas por capricho, dejemos de estigmatizar sus afecciones y de descalificarlas o minimizar sus síntomas.
*Los trastornos se presentan sin orden o jerarquía específico.
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