Autismo y Neurofeedback dinámico hoy son un tema recurrente cuando se trata de alternativas eficaces que ayuden en el tratamiento de este trastorno, que cada día parece ir en aumento en la infancia de todo el mundo. Para abundar en los beneficios de esta técnica te invito a leer el siguiente texto:
Hoy en día se observa un incremento en el registro de casos de niños y, en general, personas que se ubican en algún rango de los trastornos del espectro autista (TEA). Aun, no sabemos si es porque los médicos y especialistas en salud tienen más herramientas para el diagnóstico, porque el espectro presenta un abanico más amplio en la sintomatología en la que un mayor número de individuo pueden ubicarse o, ciertamente, los casos se han incrementado.
No obstante el ascenso de casos diagnosticados, hoy no hay un tratamiento específico, claro y contundente para todos; pero sí podemos encontrar alternativas en los avances tecnológicos que contribuyen a mejorar la calidad de vida de los pacientes así como se han desarrollado nuevos recursos que ayudan a lidiar con este mal.
Signos y Diagnóstico del TEA
Puesto que aún el conocimiento de los trastornos del espectro autista no es profundo y puntual, y que la ciencia está en proceso de comprenderlo, es difícil hacer un debido diagnóstico pues no existen análisis clínicos o pruebas médicas que lo hagan. Para llegar a un diagnóstico se debe observar el comportamiento y desarrollo del individuo. A través del tiempo y debido a esta observación, se han logrado identificar signos comunes entre las personas autistas que pueden dar indicios al respecto:
- No señalar los objetos para demostrar su interés (por ejemplo, no señalar un avión que pasa volando). No mirar los objetos cuando otra persona los señala.
- Tener dificultad para relacionarse con los demás o no manifestar ningún interés por otras personas.
- Evitar el contacto visual y querer estar solos.
- Tener dificultades para comprender los sentimientos de otras personas y para hablar de sus propios sentimientos.
- Preferir que no se los abrace, o abrazar a otras personas solo cuando ellos quieren.
- Parecer no estar conscientes cuando otras personas les hablan, pero responder a otros sonidos.
- Estar muy interesados en las personas, pero no saber cómo hablar, jugar ni relacionarse con ellas.
- Repetir o imitar palabras o frases que se les dicen, o bien, repetir palabras o frases en lugar del lenguaje normal.
- Tener dificultades para expresar sus necesidades con palabras o movimientos habituales.
- No jugar juegos de simulación o cumplimiento de roles al jugar.
- Repetir acciones una y otra vez.
- Tener dificultades para adaptarse cuando hay un cambio en la rutina.
- Tener reacciones poco habituales al olor, el gusto, el aspecto, el tacto o el sonido de las cosas.
- Perder las destrezas que antes tenían (por ejemplo, dejar de decir palabras que antes usaban).
Actualmente, no existe una cura para los TEA. Sin embargo, las investigaciones muestran que los tratamientos interdisciplinarios de intervención temprana pueden mejorar el desarrollo de estos niños.
Neurofeedback dinámico para casos de TEA
Las investigaciones han mostrado que el Neurofeedback dinámico, una técnica de entrenamiento cerebral no invasiva, favorece funciones como el habla y la socialización en los individuos con TEA. Esto lo hace un recurso auxiliar en el tratamiento de las personas con autismo que permite una evidente mejoría cuando se aplica de forma consistente y sistemática.
Una de las ventajas del Neurofeedback dinámico es que tiene el efecto final de calmar el sistema nervioso central por lo que cualquier condición se aborda de manera más predecible. Y en el área del autismo, para que estas personas accedan a áreas específicas del cerebro para la cognición, deben estar relajadas y tranquilas; de lo contrario, los dominios de funciones superiores, como el lenguaje, el razonamiento y la deducción, no son accesibles.
Neurofeedback dinámico está destinado a ayudar al individuo a recuperar un acceso más fácil a diferentes actividades y estados cerebrales; por ejemplo, ser capaz de relajarse o concentrarse de manera fluida. Cuando esto ocurre, el sueño mejora y el aprendizaje, la comprensión también aumenta. El individuo obtiene una mejora general con todas las otras terapias que trabajan desde este estado cerebral equilibrado.
Además de esto, el neurofeedback tiene otros beneficios como la mejora en las funciones cognitivas, ayuda a acelerar el proceso de recuperación del lenguaje, consigue que el menor tenga una conexión más próxima con el entorno, personas y objetos que lo rodean, y estimula a las neuronas para trabajar adecuadamente.
Con información obtenida en el artículo Neurofeedback for Autism: Brain Training Perspectives from Dr. Lise DeLong
