Hoy te explicamos qué es la enfermedad de Lyme, así como los beneficios del neurofeedback dinámico para rehabilitar a los pacientes luego de sufrir las secuelas.
Más del 14% de la población mundial ha padecido la enfermedad de Lyme, la cual es transmitida por garrapatas. Ésta es un padecimiento endémico en Norte América y en numerosas zonas de Europa. Tan sólo en el viejo continente se presentan más de 85 mil casos anuales, según nos confirma la investigadora del Instituto de Salud (México), la doctora María Guadalupe Gordillo Pérez.
¿Qué es la enfermedad de Lyme?
La enfermedad de Lyme, también conocida como borreliosis de Lyme, es causada por una infección con la bacteria Borrelia burgdorferi. Esta bacteria se propaga por las picaduras de garrapatas y las personas que trabajan al aire libre o que pasan tiempo en zonas forestales tienen mayores probabilidades de resultar afectadas.
Si no se diagnostica o si se deja sin tratar, la bacteria puede propagarse a lo largo del cuerpo partiendo desde el lugar de la picadura de garrapata.
Los síntomas tardíos y las complicaciones de la enfermedad de Lyme se desarrollan entre los 6 y hasta los 36 meses después de la infección original. Los síntomas posibles pueden incluir dolor en las articulaciones, cambios en la piel o complicaciones neurológicas, como parálisis facial y neuropatías, así como afectaciones cognitivas, como deterioro de la memoria.
¿Cómo se adquiere la enfermedad?
La enfermedad puede transmitirse cuando una garrapata, infectada con la bacteria Borrelia burgdorferi, pica a una persona y permanece prendida a ella durante un tiempo. En la mayoría de los casos, la garrapata debe permanecer prendida durante 36 horas o más tiempo para que la bacteria se transmita.
La enfermedad de Lyme no se transmite de persona a persona.
¿Qué síntomas tiene?
Los signos y síntomas de la enfermedad de Lyme pueden variar; usualmente aparecen por etapas, aunque éstas pueden aparecer superpuestas.
Etapa 1: salpullido
En el lugar de la picadura, aparece una pequeña protuberancia roja y se resuelve en unos días. Esta señal de picadura sólo es un indicativo de la presencia de la garrapata, aunque no signifique un diagnóstico definitivo de Lyme.
No obstante, otros síntomas pueden aparecer un mes después de que una persona ha sido infectada. Entre ellos, aún de carácter temprano:
Erupción en la piel o salpullido: aparece un área roja en expansión que a veces se despeja en el centro y forma un patrón de ojo de buey. Por lo general, no produce picazón ni dolor, pero puede sentirse caliente al tacto.
Además, puede presentarse fiebre, escalofríos, fatiga, dolores corporales, dolor de cabeza, rigidez en el cuello y ganglios linfáticos inflamados.
Etapa 2: síntomas posteriores
Si la infección no se trata, podrían aparecer nuevos síntomas en los siguientes meses. Algunos de ellos son:
- Eritema migratorio. La erupción puede aparecer en otras zonas del cuerpo.
- Dolor en las articulaciones. Es especialmente probable que los episodios de dolor articular intenso e hinchazón te afecten las rodillas, pero el dolor puede cambiar de una articulación a la otra.
Signos y síntomas menos comunes
Varias semanas después de la infección, algunas personas presentan:
- Problemas cardíacos, como latidos irregulares.
- Inflamación ocular.
- Inflamación del hígado (hepatitis).
- Fatiga intensa.
Problemas neurológicos
Semanas, meses o incluso años después de la infección, podrías tener inflamación de las membranas que rodean el cerebro (meningitis), parálisis temporal de un lado del rostro (parálisis de Bell), entumecimiento o debilidad en las extremidades y movimiento muscular afectado.
Los problemas del sistema nervioso y del cerebro también son posibles y pueden incluir: disminución de la concentración y trastornos de memoria.
Además, los síntomas de la enfermedad de Lyme pueden hacer que las personas sean más sensibles a cosas como la luz, los cambios de humor, la ansiedad, la confusión mental y otros desafíos.
Tratamiento
En ocasiones, especialmente cuando los síntomas son tardíos, la enfermedad es difícil de diagnosticar. Se pueden encontrar con frecuencia muchos signos y síntomas de la enfermedad de Lyme en otras enfermedades. Además, las garrapatas que transmiten la enfermedad de Lyme también pueden contagiar otras enfermedades.
Por ello, los análisis de laboratorio para identificar los anticuerpos contra la bacteria pueden ayudar a confirmar o descartar el diagnóstico.
El tratamiento en cualquier caso es el uso de antibióticos. Sin embargo, las posibles secuelas de la enfermedad deberán tratarse de manera paralela, y también hay ocasiones en que se requerirá rehabilitación.
Neurofeedback para Lyme
El entrenamiento en neurofeedback puede ayudar al cerebro a volverse más estable y moderar su reacción ante eventos incómodos. La capacidad del cerebro se puede mejorar mediante el entrenamiento con neurofeedback. Puede marcar una diferencia significativa en la capacidad para llevar una vida cotidiana común.
Las personas que padecen la enfermedad de Lyme y que han practicado el neurofeedback dinámico, han obtenido significativos beneficios desde las primeras sesiones. En el metaestudio realizado por NeurOptimal, el 43% de las personas con Lyme, tuvieron una mejoría del 10% aproximado, en las primeras 5 sesiones.
Entre los resultados se reportan:
- Más energía.
- Dormir mejor.
- Actitud positiva.
- Disminución de la sensación de fatiga.
- Mejoras en el sistema inmunológico superior.
- Menos agitación.
- Mente más clara y menos niebla mental.
- Mayor concentración
Aunque el neurofeedback en sí mismo no mitiga el proceso patológico de la enfermedad, puede ser muy útil para restaurar los niveles funcionales en las personas afectadas.
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