Estos son los 4 trastornos mentales más comunes que pueden tener mejorías con el apoyo de neurofeedback dinámico.
La pandemia por Covid 19 lo ha dejado claro: la salud mental importa y es necesario que nos sensibilicemos ante ello. Hablar de trastornos mentales debe dejar de ser tabú y formar parte de la conversación cotidiana.
No hay mejor estrategia para ello que conocer los trastornos más comunes, que cualquiera de nosotros puede padecer en cualquier momento de la vida. Por ello hoy te compartiremos de qué tratan estos padecimientos, de los que debemos olvidar viejos mitos y falsa información, con el fin de poder tener un diagnóstico y tratamiento oportuno, fuera de cualquier prejuicio.
Los 4 trastornos mentales más comunes
Los expertos aseguran que una de cada tres personas sufre o sufrirá algún tipo de trastorno mental durante su vida. Estos se encuentran estrechamente vinculados al funcionamiento neuronal y pueden alterar las funciones cognitivas durante su permanencia. Entre algunas alteraciones está merma en la memoria, falta de concentración, niebla mental, olvidos y lagunas, etc.
Entre los más comunes encontramos:
1. Trastornos de Ansiedad
Se diagnostica cuando varios síntomas ansiosos provocan angustia o un grado de deterioro funcional en la vida del individuo. Alguien con trastorno de ansiedad puede tener dificultades para actuar cotidianamente en diversas áreas de la vida: relaciones sociales, familiares, trabajo, escuela, etc.
Generalmente la ansiedad se manifiesta no sólo en un estado de ánimo alterado, con sensación incluso de muerte, sino con algunos otros síntomas físicos como taquicardia, sudoración, opresión en el pecho, ninguno de ellos de gravedad.
Por su manifestación, los trastornos de ansiedad pueden variar, entre ellos se encuentran:
- Ataques de pánico: hoy en día uno de los más comunes que se manifiesta con esa sensación de muerte.
- Trastornos fóbicos (fobias): fobia social, agorafobia, etc. Consisten en un miedo irracional cuando se encuentran frente a al estímulo fóbico, ya sea un objeto, un animal o una situación, y esto suele acabar en un comportamiento de evitación.
- Trastorno de Estrés Postraumático: surge cuando la persona ha sido expuesta a una situación extrema de alto riesgo que ha provocado una experiencia psicológica estresante. Los síntomas incluyen: pesadillas, sentimientos de ira, irritabilidad o fatiga emocional, desapego hacia los demás, etc., cuando la persona revive el hecho traumático.
- TOC: Trastorno Obsesivo Compulsivo en el que el individuo experimenta pensamientos, ideas o imágenes intrusivas. Se caracteriza por estar asociado una sensación de temor, angustia o estrés que se supone solucionada con un acto compulsivo. Los pensamientos que causan malestar (obsesiones), provocan que la persona realice ciertos rituales o acciones (compulsiones) para reducir la ansiedad y sentirse mejor.
- Trastorno de Ansiedad Generalizada: el trastorno se caracteriza por preocupación y ansiedad crónica. Este también suele manifestarse con síntomas físicos como náusea, fatiga, tensión muscular, problemas de concentración, trastornos de sueño, entre otros.
2. Trastornos del Estado de Ánimo
Los trastornos del estado de ánimo son trastornos de la salud mental caracterizados por la existencia de alteraciones emocionales, consistentes en periodos prolongados de tristeza excesiva (depresión), de exaltación o euforia excesivas (manía), o de ambos. Los más comunes son:
- Trastorno de bipolaridad: se caracteriza por cambios exagerados en el estado de ánimo, desde manía a la depresión mayor. Durante los episodios de manía, la persona puede incluso dejar su trabajo, aumentar sus deudas, y sentirse lleno de energía a pesar de dormir solamente dos horas al día. Durante los episodios depresivos, la misma persona puede incluso no salir de la cama.
- Trastorno depresivo: la depresión es una psicopatología seria y debilitante, y afecta a cómo un individuo se siente, piensa y actúa. Puede provocar síntomas tanto físicos como psicológicos. Esencialmente este trastorno se fundamenta en una pérdida de sentido de vida, apatía y desmotivación.
3. Trastornos psicóticos
Los trastornos psicóticos son trastornos mentales graves que causan ideas y percepciones anormales. Las personas con psicosis pierden el contacto con la realidad. Dos de los síntomas principales son delirios y alucinaciones.
Los delirios son falsas creencias, tales como la idea de que alguien está en su contra o que la televisión les envía mensajes secretos. Las alucinaciones son percepciones falsas, como escuchar, ver o sentir algo que no existe.
Entre los trastornos psicóticos están:
- Trastorno delirante
- Esquizofrenia
- Trastornos de personalidad
- Trastorno Límite de la Personalidad (TLP)
- Trastorno antisocial
- Estos trastornos pueden ser tratados, pero no cuentan hasta ahora con una cura.
4. Trastornos de la Conducta Alimentaria
Los trastornos de la conducta alimentaria son problemas relacionados con la forma en que comen las personas, generalmente vinculados con la autopercepción. Pueden ser muy perjudiciales para la salud de la persona, sus emociones y sus relaciones personales. Hay varios tipos distintos de trastornos de la conducta alimentaria.
- Anorexia: Las personas que sufren anorexia restringen la ingesta de alimentos haciendo dieta, casi no comen, y lo poco que ingieren les provoca un intenso sentimiento de malestar.
- Bulimia: un trastorno que está asociado a alteraciones en el cerebro. Entre ellas se encuentra la degradación de la materia blanca (que es por donde pasan los gruesos conjuntos de axones neuronales) en la corona radiata, que está relacionada entre otras cosas al procesamiento de los sabores. Se caracteriza por pautas de alimentación anómalas, con episodios de ingesta masiva de alimentos seguidos por maniobras que buscan eliminar esas calorías (inducirse al vómito, consumir laxantes, etc.).
- Trastorno por atracón: quien lo sufre consume con frecuencia grandes cantidades de comida y siente que ha perdido el control durante el atracón. Después de la sobreingesta, se presentan una serie de emociones incómodas como angustia, culpa, ansiedad.
Intervención en trastornos mentales con neurofeedback
Cada uno de estos trastornos deberá diagnosticarse y abordarse de manera individual. La mayoría de ellos encontrará mejora en la intervención multidisciplinaria, con abordaje médico, psiquiátrico, psicológico.
Pero también, puede hacerse uso de herramientas de apoyo que agilicen la disminución de los síntomas, como el caso del neurofeedback dinámico, entre cuyos beneficios se encuentran:
- Promueve hábitos de sueño saludables.
- Facilita la gestión de los trastornos del sueño.
- Ayuda a manejar mejor el estrés.
- Disminuye los niveles de ansiedad.
- Mejora el estado de ánimo.
- Logra mayor agudeza mental.
- Promueve un estilo de vida saludable.
- Calma metal para el correcto descanso y Recuperarse de los problemas de sueño, de cualquier tipo.
- Obtener un sueño reparador que permita sentirse más descansado por el día.
- Conciliar el sueño en mucho menos tiempo, no despertarse tantas veces o volver a dormir sin problemas en caso de despertar por las noches.
- Disminuir la ansiedad, estrés, tristeza que en muchos casos lleva asociado con los problemas de sueño.
- Se logra tener mayor tranquilidad tanto de día como de noche.
- Ayuda en la regulación de la producción de neurotransmisores.
- Se disminuye la impulsividad e hiperactividad.
- El cerebro aprende a regularse para tener mayor calidad de sueño, afectando positivamente nuestra calidad de vida, con efectos permanentes.
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