Dificultades de aprendizaje y NeurOptimal®
Las dificultades de aprendizaje son cada vez más comunes, y representan un obstáculo en desempeño escolar de niños y niñas. Por ello, recursos como el entrenamiento cerebral con la técnica de NeurOptimal® resultan una opción útil para ayudar en su desempeño escolar.
Aunque el proceso de aprendizaje es igual para todos, cada niño en el aula puede encontrar sus propios obstáculos. Especialmente aquellos que por cuestiones neurológicas se encuentran en condiciones diversas que limitan su desempeño escolar.
Los trastornos neurológicos del desarrollo, desde el espectro autista, déficit de atención, con o sin hiperactividad, el síndrome de Rett, dislexia, entre otras son ejemplo de condiciones multifactoriales que dificultan el aprendizaje de niños y niñas.
Condiciones que suelen afectar el aprendizaje
Hoy en día se considera que los problemas de aprendizaje pueden estar afectando entre un 5% y 10% de los niños escolarizados. Asimismo, el número de niños en programas de educación especial clasificados con problemas del aprendizaje se incrementó un 191% entre 1977 y 1994 en los países occidentales.
Se calcula que, tan sólo en el caso del trastorno de déficit de atención con hiperactividad, las tasas de prevalencia del trastorno a nivel mundial son muy variables oscilando del 4 al 5% de los niños en edad escolar; aunque algunos estudios consideran que la prevalencia podría llegar al 17%.
Por su parte, la Organización Mundial de la Salud reporta que uno de cada 160 niños tiene un trastorno del espectro autista (TEA) y la tendencia es a incrementarse.
Además, se considera que el 1% de los niños padece alguna discapacidad intelectual, es decir que posee una inteligencia y capacidades para desenvolverse por debajo del nivel promedio.
Estos condicionantes (TDAH, TEA, dislexia…) suponen fuertes obstáculos para el desempeño escolar de los niños, por las dificultades de aprendizaje que experimentan en cada caso.
Dificultades de aprendizaje
La dificultad de aprendizaje —derivada de problemas neurológicos, aunque no exclusivamente TDAH o TEA— es más frecuente de lo que quisiéramos. Ésta se refiere a un grupo heterogéneo de trastornos que se manifiestan por el impedimento en la adquisición y uso de la escucha, habla, lectura, escritura, razonamiento o habilidades matemáticas, atención y memoria.
Pueden existir junto con las dificultades de aprendizaje, problemas en las conductas de autorregulación, percepción e interacción social, pero esto no constituyen por sí mismas una dificultad de aprendizaje.
Muchos niños con trastornos de aprendizaje, también llamados discapacidades de aprendizaje, se esfuerzan en la escuela, aunque no logran tener los resultados deseados (ni por los maestros, ni por los padres), generando gran nivel de frustración, ira y, en ocasiones, mal comportamiento.
De igual modo, quienes tienen dificultades de aprendizaje también pueden experimentar ansiedad de ejecución, depresión, baja autoestima, fatiga crónica o pérdida de motivación. Algunos niños pueden portarse mal para desviar la atención de sus desafíos en la escuela.
¿Cómo sé si mi niño tiene dificultades de aprendizaje?
Se puede identificar que un niño tiene problemas en el aprendizaje si se observan algunas de estas situaciones.
- Dificultad para entender y seguir tareas e instrucciones.
- Problemas para recordar lo que alguien le acaba de decir.
- Dificultad para dominar las destrezas básicas de lectura, deletreo, escritura y/o matemática, por lo que fracasa en el trabajo escolar.
- Dificultad para distinguir entre la derecha y la izquierda o para identificar las palabras. Puede presentar tendencia a escribir las letras, las palabras o los números al revés.
- Falta de coordinación al caminar, hacer deporte o llevar a cabo actividades sencillas como sujetar un lápiz o atarse el cordón del zapato.
- Facilidad para perder o extraviar su material escolar, libros y otros artículos.
- Dificultad para entender el concepto de tiempo, confundiendo el ‘ayer’ con el ‘hoy’ y/o ‘mañana’.
- Tendencia a la irritación o a manifestar excitación con facilidad.
¿Cómo ayudar a un niño con dificultades de aprendizaje?
La intervención temprana es fundamental porque el problema puede agravarse. Un niño que no aprende a sumar en la escuela primaria no será capaz de abordar el álgebra en la secundaria.
Por ello, el camino para ayudar al niño con dificultades de aprendizaje comienza con proveer de diagnóstico adecuado a través del médico familiar y especialistas en neurociencias que puedan indicar si existe algún trastorno como déficit de atención, autismo, dislexia, etc., o qué clase de condición está dificultando el proceso de aprendizaje.
Según el caso, los especialistas indicarán el tratamiento adecuado, ya sea médico o terapéutico.
Además, los padres pueden apoyar a los niños con entrenamiento cerebral a través del neurofeedback, con métodos innovadores como NeurOptimal®. Una técnica científicamente probada, que trabaja directamente con las funciones cerebrales ayudando a solucionar problemas comunes relacionados con el aprendizaje y comportamiento de los niños.
Beneficios del Neurofeedback dinámico
- Ayuda al autocontrol
- Incrementa la creatividad
- Mejora la atención, concentración y memoria
- Acelera todo tipo de aprendizaje
- Disminuye el estrés y los miedos
- Aumenta la confianza en uno mismo
De igual manera, el neurofeedback dinámico trabaja en la causa del conflicto que promueve la dificultad de aprendizaje, ayudando en casos problemas de conducta, fracaso escolar, trastornos de aprendizaje, discalculia, dislexia, trastornos del desarrollo, ansiedad, tiempo cognitivo lento, enuresis, trastornos del sueño, migrañas, estados de desmotivación, TDAH, autismo, asperger etc.