Este martes es su Día Internacional y por ello hoy te contamos qué pasa en el cerebro cuando juegas ajedrez.
A finales de 2020, con la pandemia de Covid 19 vino también el auge de jugadores de ajedrez. Esto se debió, por una parte, a que los tiempos de ocio aumentaron dentro de casa por la “cuarentena” y, por otro lado, al éxito de la serie Gambito de dama, historia centrada en una joven jugadora de ajedrez.
La serie de Netflix no sólo se ubicó como la más vista de la plataforma y entre las preferidas del público, sino que también hizo que más personas quisieran jugar ajedrez y que las ventas de tableros se dispararan.
Gente jugando ajedrez
Según datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), alrededor del 70% de la población adulta (Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Rusia, India) ha jugado ajedrez en algún momento de su vida, y 605 millones de adultos lo juegan regularmente. Lo que deja claro que el ajedrez ha sido uno de los juegos más populares del mundo.
De acuerdo con The Guardian, durante el confinamiento, eBay reportó un aumento en la venta de tableros de un 60%, cifra que creció tras el estreno de la seria hasta cerca del 215% tan sólo en Estados Unidos. Mientras que diferentes sitios web dedicados a este juego, como Chess.com, Chess24 y weChess, reportaron un aumento significativo en sus usuarios.
Nick Barton, vocero de Chess.com, dijo al diario que en la Unión Americana se reportaron cerca de seis mil nuevos miembros diarios del 1 al 22 de octubre, alcanzando una cifra récord de 30 mil registros en un día.
Día del Ajedrez
Es tal la relevancia del ajedrez en el mundo que la ONU ha declarado el 20 de julio como el Día Internacional del Ajedrez. Una fecha que conmemora la fundación de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE), en París 1924.
Según la ONU, la designación del Día Mundial del Ajedrez no sólo reconocerá el importante papel de la FIDE en el apoyo a la cooperación internacional para la actividad ajedrecística y el objetivo de mejorar la convivencia respetuosa entre todos los pueblos del mundo, sino que también brindará un importante soporte para fomentar el diálogo, la solidaridad y la cultura de la paz.
El ajedrez es uno de los juegos más antiguos, tiene un carácter intelectual y cultural, y combina elementos del deporte, el razonamiento científico y el arte. Cualquier persona, en cualquier lugar, puede jugar ya que trasciende las barreras del idioma, la edad, el género, la capacidad física o la situación social.
Qué pasa en el cerebro cuando juegas ajedrez
Siguiendo las evidencias científicas, podemos decir que el ajedrez es, sin duda, una actividad benéfica para el cerebro. El juego exige prestar atención, planificar y memorizar (memoria de trabajo). Todo ello contribuye a un buen ejercicio cerebral pues activan la memoria, mejoran la concentración, la creatividad y la resolución de problemas.
En 1991 una investigación realizada por doctor Stuart Margulies, determinó que los niños que se habían apuntado al programa de ajedrez en el colegio mostraban una mejor capacidad lectora.
Un estudio de la universidad alemana de Tübingen demostró que, gracias a las exigencias neuronales del juego, la práctica del ajedrez hace que se activen ambos hemisferios cerebrales.
Por su parte, un estudio dirigido por el doctor Robert Freidland, quien analizó las aficiones dos centenares de personas mayores, identificó que aquellos que jugaban a ajedrez podrían tener menos riesgo de padecer Alzheimer. Información también confirmada por el estudio publicado en el New England Journal of Medecine.
5 beneficios para tu cerebro
- Aumenta la creatividad pues el jugador debe pensar todos los movimientos que podría llevar a cabo en una jugada. Debe imaginar cómo llegar a cada posición, lo que desarrolla su creatividad.
- Previene el Alzheimer. Varios estudios longitudinales han confirmado este efecto beneficioso. Por ello, el ajedrez ha empezado a utilizarse para luchar contra el desarrollo de estas patologías.
- Incrementa el desarrollo cerebral. Las exigencias mentales del ajedrez desafían al cerebro y estimula el crecimiento de las dendritas al desafiar al cerebro, estimulan el crecimiento de las dendritas*. A mayor número de dendritas, la comunicación neuronal en el cerebro mejora y se vuelve más rápida.
- Mejora nuestra eficacia en situaciones de estrés. El tiempo y la amenaza permanente que se viven en cada jugada de ajedrez suelen generar estrés mental positivo. Ello permite al jugador aprender a mantener la calma y tener más autocontrol.
- Mejora la memoria. El ajedrez requiere de respuestas rápidas, precisión en las jugadas concentración y memoria. Cada jugada exige encontrar múltiples soluciones basadas en la experiencia o el conocimiento previo de partidas similares, respuestas que también se pueden encontrar en la historia de los grandes maestros del ajedrez que muchos practicantes memorizan.
Neurofeedback para el ajedrecista
Como vemos, son muchos los beneficios que brinda el ajedrez a nuestro cerebro, pero a su vez los jugadores –especialmente los profesionales— requieren de herramientas que les permitan un mayor rendimiento frente a los constantes desafíos que la práctica del ajedrez les requiere.
Gracias al entrenamiento neuronal con métodos como el de NeuroDOZA se puede encontrar:
- Mayor estabilidad emocional
- Baja los niveles de estrés que la competencia impone
- Alcanzar mayor nivel de focalización en el juego
- Posibilidad de encontrar nuevas jugadas al adquirir nuevas perspectivas
- Mayor control de la situación frente a la partida
- Mejora de la memoria y concentración dentro del juego
- Disminución del estrés y la ansiedad por competir
- Tener un estado de relajación que permita alcanzar el bienestar cotidiano
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*Dendrita: parte de la neurona que se activa ante los estímulos y se pone en contacto con otras neuronas incrementando las conexiones neuronales.