Continuamos esta serie de temas sobre los trastornos mentales. Buscando desmitificar estos padecimientos hoy te contamos qué es el trastorno paranoide de la personalidad.

Un día Julián empezó a sospechar que sus vecinos le espiaban. Comenzó a recelar de ellos en todo momento, llegó a creer que pensaban secuestrarlo, así que se atrincheró en su casa y dejó de salir porque —decía— estaba seguro que apenas pusiera un pie fuera de casa le harían algún daño.  

Luego comenzó a creer que el secuestro era para llevarlo a un laboratorio donde insertarían un chip para lavar su cerebro, así que se protegió con un casco de futbol de modo que nadie pudiera tener acceso a su cabeza.  

Cuchicheaba frases incoherentes y amenazaba a personas que no estaban en la habitación. Fue cuando su madre decidió llevarlo al médico, donde le diagnosticaron trastorno paranoide de la personalidad. 

¿Qué es el trastorno paranoide de la personalidad? 

La paranoia es una condición vinculada a ciertos trastornos mentales, la cual tiene que ver con delirios. Es decir, el paciente manifiesta ideas descabelladas en las que se cree con una intensidad que va más allá de lo razonable.  

El trastorno paranoide de la personalidad es un desorden con el que se sufre una suspicacia extrema. Las personas que viven con este trastorno son excesivamente desconfiadas, muestran recelo muy acentuado respecto al resto de las personas, siempre interpretan que las intenciones de los demás son maliciosas.  

Además de estos síntomas se experimentan también episodios paranoides; es decir, etapas más o menos prolongadas en las que los síntomas son más intensos. 

Signos de paranoia 

Suele ser frecuente que la persona interprete, sin motivo alguno, que otros lo atacan, ya sea riéndose de él, con burlas u ofensas, etc. Asimismo, tendrá ideas persecutorias, síntomas psicosomáticos, celotipia o celos enfermizos… 

Igualmente, ante la duda respecto a un comportamiento determinado de otros, el paranoide elegirá el peor escenario, el que más le afecté o vaya en su contra.  

Estos sentimientos de desconfianza son extensibles a todas las personas que les rodean, incluyendo sus seres queridos. Como consecuencia, estos son cada vez menos, ya que poco a poco se va produciendo un aislamiento social del afectado. 

¿Cómo se origina la paranoia? 

De acuerdo con el psiquiatra Enrique González Duro, “el pensamiento paranoide es rígido e incorregible: no tiene en cuenta las razones contrarias, solo recoge datos o signos que le confirmen el prejuicio para convertirlo en convicción”. 

Las causas del Trastorno paranoide de la personalidad se desconocen. Éste arece ser más común en familias con trastornos psicóticos, como la esquizofrenia y el trastorno delirante, lo que sugiere que los genes pueden estar involucrados. Otros factores psicológicos y sociales también pueden estar relacionados. 

Por su parte, la neuropsiquiatra Nancy C. Andreasen, investigadora de la Universidad de Iowa, considera que la propensión a padecer paranoia no depende de una sola anomalía neuronal, sino que existen trastornos en varias regiones cerebrales y sus conexiones.  

En escaneos cerebrales de personas paranoides se observa actividad más baja de lo normal en los lóbulos frontales, funcionamiento anormal en el tálamo (sobre todo cuando se tienen alucinaciones) y atrofia en el tejido cerebral.  

Así también se cree que algunas lesiones cerebrales pueden estar relacionadas con tipos concretos de pensamientos paranoicos. Por ejemplo, el síndrome de Capgras, con el cual se tiende a creer que amigos y familiares han sido sustituidos por otras personas físicamente iguales, este síndrome se cree que se debe a daños en las conexiones entre el sistema límbico y áreas de la corteza cerebral.  

Por otra parte, algunos estudios la relacionan con complicaciones en el parto, falta de oxígeno o el bajo peso del bebé. 

Tratamiento del Trastorno Paranoide de la Personalidad 

Llegar a un diagnóstico y a un posible tratamiento es tan complicado como poder conducir a la persona paranoide a un consultorio médico especializado. Con frecuencia estarán recelosos del médico y creerán que algo malo les ocasionará, por lo que se negarán a la revisión o al tratamiento.  

Pero si el tratamiento se acepta, éste deberá combinar medicamentos y psicoterapia frecuente, para controlar el trastorno.  

El neurofeedback dinámico puede ayudar como apoyo a mejorar los resultados del tratamiento, como en el caso de la esquizofrenia algunos estudios a pequeña escala han demostrado que se pueden manejar los episodios paranoides con estrategias de autorregulación neuronal.  

NeurOptimal® en apoyo al trastorno paranoide de la personalidad

Métodos como el de NeurOptimal® permiten fomentar la estabilidad, el autocontrol y mejorar la concentración, regulando la actividad cerebral asociada a las alucinaciones y paranoias.  El objetivo es poder regular y estabilizar la actividad que causan las posibles alteraciones en el estado de ánimo, mejorando el funcionamiento de las redes neuronales, las cuales se encargan de poder administrar los distintos procesos emocionales y cognitivos.  

Asimismo, ayuda a reeducar, estabilizar y regular los patrones neuronales a modelos más saludables. Todo ello ayudará a los sujetos a autorregularse y a promover la estabilidad del estado de ánimo, así como proporcionar:  

  • Mayor susceptibilidad a los cambios de humor.  
  • Mejora de las habilidades y relaciones sociales.  
  • Aumento de la capacidad de concentración.  
  • Reducción de la ira.  
  • Mayor tolerancia a la frustración. 

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