Entrenamiento cerebral para limitar la enuresis
Mojar la cama es un momento bochornoso cualquier niño que debió haber pasado ya la etapa de control de esfínteres; sin embargo, la enuresis es común aún superada esta etapa (de los cuatro a los seis años, como edad extrema).
La enuresis es la emisión repetida de la orina ya sea de manera voluntaria o involuntaria. Es una afectación recurrente que experimenta el 20% de los niños de 6 años en promedio, al menos una vez a la semana y durante un mínimo de tres meses consecutivos.
Para poderse considerar un problema de enuresis hay que descartar que dicha incontinencia no sea atribuible a los efectos fisiológicos de alguna sustancia (como un diurético) u otra afección médica, como diabetes, espina bífida o epilepsia. Asimismo, en niños menores de 5 años no puede considerarse enuresis, debido que aún es edad límite para el control de esfínteres.
La enuresis se puede presentar tanto en casos de niños dormidos como despiertos, de ahí que ésta se divida en tres tipos:
- Enuresis sólo nocturna: Se produce únicamente durante el sueño nocturno.
- Enuresis sólo diurna: Se produce estando despiertos.
- Enuresis nocturna y diurna: Se produce tanto de noche como de día, ya que es una combinación de los dos subtipos anteriores.
Causas
La enuresis nocturna puede producirse porque el niño se queda profundamente dormido y no se despierta cuando su vejiga se llena y debe vaciarla. Otra causa puede ser la alteración del sueño, no haber aprendido bien a controlar la micción durante los primeros años de aprendizaje o como resultado de alguna otra cuestión.
Asimismo, el estrés en el niño puede provocar la aparición de enuresis, sobre todo cuando el niño ya había podido controlar la micción y tras un periodo vuelve a mojar la cama (enuresis secundaria). Factores como la separación o divorcio de los padres, presión escolar, fallecimiento de un familiar, la llegada de un nuevo hermano, o alguna otra clase de hecho traumático puede ser detonador de la enuresis secundaria.
Consecuencias
Los niños que mojan la cama o que tienen enuresis diurna viven avergonzados y ello les genera estrés y ansiedad; lo que puede generar círculos viciosos porque el estado anímico que genera el padecimiento se suma a las posibles causas psicológicas de la enuresis.
Asimismo, pueden ser víctima de burlas y señalamientos lo que les puede causar retraimiento, aislamiento y sentimientos de culpa.
Entrenamiento con NeurOptimal para lidiar con la enuresis
En un gran porcentaje de niños, la enuresis desaparece de forma espontánea antes de los 6 años de edad. Si este proceso no se lleva a cabo hay que tener en cuenta los efectos psicológicos en el menor (vergüenza) y llevar a cabo acciones específicas.
Aunque se suele dar tratamiento médico a los niños, éste no suele ser del todo eficaz y, en ocasiones, el problema vuelve cuando la medicación se suspende. Lo ideal es ayudar al niño a conocer su cuerpo y a trabajar con el control de su vejiga; pero también puede ayudársele con el entrenamiento a base de neurofeedback dinámico.
El resultado de este entrenamiento del cerebro es que se refuerzan las conexiones neuronales débiles y se crean otras nuevas, lo que se traduce en una mayor estabilidad emocional y en un mayor bienestar psicológico. Esto le permitirá reducir los síntomas de ansiedad y angustia que experimenta el niño, y que son producidos por sentimientos impotencia, vergüenza y tristeza que conlleva este tipo de trastornos.
Esta técnica es beneficiosa para todas las personas pues es inocua (no emite ondas), eficaz y agradable. Además no implica la ingesta de medicamentos.
