Con estas 7 Claves de cómo desconectar la mente podrás encontrar espacios para ti y conquistar tu bienestar.

Hoy vivimos rodeados de estímulos diversos que hacen trabajar nuestra mente 24/7 y difícilmente alcanzar un estado de relajación tal que nos permita dormir y descansar apropiadamente. Esto cobra factura en nuestra salud física y también mental.  

El estrés negativo y la ansiedad son consecuencia de este estado de hiper estimulación mental a la que, de alguna manera, nos hemos acostumbrado.  Los dispositivos móviles han contribuido grandemente en esta sobre estimulación, por cierto; pero no son los únicos, las preocupaciones cotidianas, las exigencias sociales y laborales, así como ciertos hábitos de pensar demasiado las cosas también sobre exponen a nuestra mente a una estimulación estresante. 

Por ello es cada vez más difícil desconectar nuestra mente y alcanzar mejores nivele de relajación. Nos hemos deshabituado a esta práctica, dándole permiso a los pensamientos a vagar libremente aun cuando estamos durmiendo. Hemos acostumbrado al cerebro a funcionar de cierta manera, a generar conexiones neuronales concentradas en la preocupación y ahora estamos pagando el costo.  

Afortunadamente el cerebro lo aprende todo si así lo enseñamos, gracias a la neuroplasticidad. Es capaz de dejar de enfocarse en lo que te estresa y aprender a desconectar más fácilmente. Todo se trata de práctica constante y disciplinada. 

Por qué debemos desconectar la mente 

Una mente sobrecargada produce estrés negativo, falta de motivación, ansiedad e incluso puede se detonador de depresión. Desconectar es importante, entre otras cosas, para:  

  • Disfrutar el presente. 
  • Conectar con nuestras personas favoritas, dedicándoles atención.  
  • Escuchar y detectar situaciones importantes de un futuro inminente. 
  • Planificar proyectos constructivos sin perdernos en conjeturas infundadas por el miedo. 
  • Dormir bien para llenarnos de energía. 
  • Rendir en el trabajo y con la familia. 
  • Tener la sensación de que tenemos el control de lo que nos sucede. 
  • Mantener una autoestima sana. 
  • Reducir el nivel de cortisol en sangre para tener un sistema inmunológico fuerte. 

Cómo saber cuándo debemos desconectar la mente

Por supuesto, no podemos desconectar la mente a mitad de la jornada laboral, por muy agotados que nos sintamos. Pero sí podemos identificar, cada uno de nosotros, algunas señales que nos digan que es tiempo de hacer una pausa para despejar la mente.  

Una buena forma de hacerlo es observar cómo está nuestra respiración: fluye o se entrecorta, hay personas que incluso se olvidan de respirar al sentirse tan tensas.  

Otra alerta es la forma en la que se dan nuestros pensamientos: todos a la vez, sin conclusiones, sin soluciones. A veces la misma mente comienza a distraerse, avisándonos que necesitamos desconectar. La observación y el auto conocimiento nos permitirá identificar el momento.  

7 Claves de cómo desconectar la mente 

El cerebro está integrado por zonas diferentes, cada una con una tarea específica. Al frente, el lóbulo frontal se encarga de nuestra consciencia; es la parte que dirige nuestros pensamiento, estrategias y planificación.  

Para que esta zona se mantenga enfocada en una determinada tarea, y no se disperse en varios pensamientos o miedos, debemos llevar su atención hacia una determinada actividad que, en los casos en los que estamos dispersos, se puede concentrar en algo como la respiración. La respiración ayuda a calmarlo. Así podemos lograr un descanso para nuestra mente. 

Igualmente, podemos considerar el ocio activo, el cual es ese tiempo libre que dedicamos a realizar actividades que nos enriquecen y dan lugar al crecimiento: la lectura, el deporte, la meditación, etc. Por el contrario, el ocio pasivo no te aporta enriquecimiento, ver una película u escuchar música sin más puede ser un ejemplo.  

1. Respiración 

Aprender técnicas de respiración que nos permitan enfocarnos en ello y dejar de lado cualquier pensamiento que pueda agobiarnos. Dedicar algunos minutos al día a esta práctica nos permitirá tener un espacio seguro para desconectar, especialmente antes de dormir.  

2. Practicar el mindfulness 

Para calmar la mente aprendamos esta técnica que busca centrar nuestra atención únicamente a lo que estamos haciendo en cada momento y en las emociones o sensaciones que nos produce. Ello nos permitirá vivir en el presente y olvidarnos por un momento de la presión mental de nuestras preocupaciones.  

3. Salir con amigos 

Esta actividad es una práctica enriquecedora de ocio. Conversar con los amigos puede ayudarnos a romper con la rutina al hablar de cosas distintas a las del día a día. Si algún problema nos preocupa, compartirlo es el primer paso para solucionarlo. 

4. Hacer un deporte extremo 

Aunque suene demasiado arriesgado, los deportes extremos requieren de nuestra total atención y concentración, para protegernos y no poner en riesgo la vida. Esto además puede producir dopamina y adrenalina, que son neuroquímicos que producen motivación.  

Si, además, estos deportes los hacemos con amigos, ya estamos cumpliendo también con el punto anterior, 😉  

5. Cambiar de ambiente 

Podemos cambiar el orden de la oficina, la decoración de la casa o la ruta camino a casa. Estos son pequeños respiros de la cotidianidad que enmarca la exigencia cotidiana.  

Aunque el cambio de ambiente también implica salir a caminar por el barrio, ir al bosque, encontrar una nueva cafetería, una tienda nueva, etc. Hacer cosas distintas y encontrar alternativas relaja la mente con la novedad y nos aleja de las preocupaciones momentáneamente.  

6. Tener un hobby 

Aunque esto parece obvio, cada vez nos damos menos tiempo a aficiones que realmente nos gustan, lo dejamos por responsabilidades que nos hemos adjudicado de forma estricta. Debemos darnos el tiempo de hacer aquello que realmente nos guste y que nos ayude a desconectar la mente. ¡Es algo que hay que tomarse en serio! 

7. Practica el neurofeedback dinámico 

Ya lo sabes, esta es una herramienta que puede ayudar a recobrar la flexibilidad neuronal, estimular la plasticidad alcanzar niveles de calma tal como la meditación, además de muchos otros beneficios.  

  • Mejor gestión del sueño  
  • Control de los estados ansiosos  
  • Mejora de la memoria  
  • Facilita la focalización de la atención  
  • Más sensación de clama y relajación  
  • Disminución de la hiperactividad causada por ansiedad  
  • Menor irritabilidad e incomodidad  
  • Más control del dolor  
  • Mejor gestión del estrés  
  • Menos sensación de estar abrumado/a 

NEUODOZA | CITAS | RENTA TU EQUIPO 

📞 514 447 8434 🇨🇦 

Translate »
Inscríbete

Inscríbete

Recibe nuestra lista de precios, descuentos, promociones especiales y nuestro boletín informativo. verifica todos tus buzones de correo.

¡Felicidades! En pronto recibirás maravillosas noticias de nosotros